El Seco debe su nombre a un pino ancestral
Esta casa, el amplio lomo en el que se enclava y muchos otros elementos del lugar, como diversas fuentes, el camino y la era, toman su nombre del Pino Seco, un antiguo ejemplar de pino canario.
La zona estuvo principalmente dedicada el pastoreo de cabras. Su propietario, el terrateniente Arístides Guimerá, poseía dos grandes rebaños, uno en esta zona de cumbre y otro en la costa.
Las plantas del Seco eran muy diferentes y eso se reflejaba en una producción de leche y queso menos grasos, con un sabor y composición diferente a los costeros.
Todavía hay un rebaño de cabras que pasta en la finca del Seco. Sus quesos se elaboran en Chimiche y, en ocasiones, se vende la leche a la Quesería de Benijos o a otras de Gran Canaria.